
“Hablar para plantear una preocupación de cualquier tipo es crucial para
nuestra cultura en PwC y nuestro propósito. Tener el valor de decir algo
que no parece correcto demuestra integridad y voluntad de protegerse mutuamente
y servir a nuestro grupo de partes interesadas más amplio. Todos compartimos
la responsabilidad de crear un lugar de trabajo respetuoso y proteger y
mejorar nuestra marca, es un ejemplo vivo de lo que representamos en PwC”.